16/1/08

MIS LADRILLOS


Recuerdo de mi infancia, uno de mis juguetes preferidos eran los famosos "Rastis", que para mi época de niño se llamaban "Mis ladrillos", y hoy por hoy llevan el nombre de LEGO, marca que los popularizó y los llevó a una dimension comercial mundial.
Pasaba horas construyendo cosas, recuerdo que de esas cuadradas cuestiones surgian autos para mis Playmovil o mis Rambos, o terribles robots/fantasmas que se enfrentaban a mis Cazafantasmas...
Descubí también en algun momento que podía edificar casas, y creo que allí empezó lo entretenido, las primeras no tenían sentido, se desmoronaban, no lograba pegar una pared con otra, o terminaba de levantar una gran ilera de ladrillos y luego descubría que esa "casa" no tenía ni puertas ni ventanas, y mis Playmovil tenían que ingresar a la vivienda por el techo "corredizo" que yo mimso debía improvisar...
Con el tiempo, y leyendo las intrucciones (las cajas las traían je) descubrí que había una manera de encimar los ladrillos, que de esa manera quedaba fortalecida, y luego hacer de corrido las paredes de los cuatro laterales, logrando encimar cada pared... en fin, terminé por convertirme en un "arquitecto"… de casas de rastis.

Enero de 2008, arranca un nuevo año, y por lo general luego de un merecido descanso, todos comenzamos a esbozar en nuetra mente proyectos, objetivos, metas por cumplir para cada faceta de nuestra vida, en relacion a los estudios, trabajo, en las relaciones con nuestra familia, amigos; proyectos personales, en relación a nuestro ministerio y servicio a Dios, etc, etc, etc.

Muchas de las enseñanzas plasmadas en la Biblia, y que estan destinadas a los planes que nosotros hacemos durante nuestra vida, se relacionan (metafóricamente o no) con una obra en construcción. He aquí unos sabios consejos:

1. La voluntad de Dios.
Proverbios 16:3 dice: "Pon en manos del Señor TODAS tus obras, y tus proyectos se cumplirán". Si deseamos que nuestros planes se cumplan, debemos primeramente depositarlo en las manos de Dios, sólo de esa manera entenderemos si lo que planificamos es realmente lo que Dios esta queriendo para nosotros en este tiempo, si es un plan que será de bendición para mi vida y para las vidas de quienes me rodean.
Estar en estrecha relación con la voluntad de Dios es una estado que anhelo para mi vida, porque de esa única forma tendré la certeza de que TODO va a estar bajo control (de Dios!).

2. El socio perfecto.
Proverbios 24:20 dice: "Con sabiduría se construye la casa; con inteligencia se echan los cimientos. Con buen juicio se llenan sus cuartos de bellos y extraordinarios tesoros".
Sabemos que la sabiduría proviene sólo de Dios (Proverbios 2:6), y también es él quien nos da la posibilidad de desarrollar nuestra inteligencia; nuestro juicio (desiciones) serán los que decoren esa habitación dispuesta para nosotros. Es decir, un 50% lo obtendremos en la búsqueda de la sabiduría e inteligencia de Dios, el otro 50% nos corresponde a nosotros, en desarrollar al máximo nuestro potencial.
Nuestro socio eterno está dispuesto a colaborar en nuestros planes!!! Depende de mi decidir por él.

3. Separar escombros de ladrillos.
En toda construcción, toda persona sabe que con los ladrillos se edifica, pero antes de esto es necesario examinar el terreno, limpiar de todo escombro que obstaculice la obra que se está por realizar, para asegurarnos de que el proyecto quede en perfectas condiciones.
En Jeremías 1:10, Dios nos dice “Mira, hoy te doy autoridad sobre naciones y reinos para arrancar y derribar, para destruir y demoler, para construir y plantar”. Sometiéndonos al poder y autoridad de Dios podremos dejar el "terreno" de nuestra vida libre de "escombros", para que todo lo que construyamos sea nuevo, bendecido por Dios, dejando atrás todo aquello que obstruya el fluir de su espíritu en nuestra vida.

4. Firmeza en la obediencia.
En el pasaje de Mateo 7:24-25 Jesús nos dice: “Por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca. Cayeron las lluvias, crecieron los ríos, y soplaron los vientos y azotaron aquella casa; con todo, la casa no se derrumbó porque estaba cimentada sobre la roca.”

Que para este nuevo año que recién comineza, podamos planificar, proyectar, los planes que Dios tiene para nosotros, edificando cada cosa en el nombre de Jesús, sólo de esta manera tendremos la plena seguridad de que TODO permanecerá en perfectas condiciones, y que la bendición de Dios será derramada sobre cada obra.
Que la palabra de Dios sea la "guía de instrucciones" de nuestras futuras obras.

No hay comentarios.: