¿Cuánto cuestan tus sueños?

Me gustaría que prestes atención a los primeros 5 minutos del video posteado aquí arriba; es un extracto de la película "En busca de la felicidad", basada en hehcos reales de la vida de Chris Gadner.
En resumen, esta película muestra como fueron los comienzos del actual magnate y filántropo, quién tuvo una infancia pobre, sufrida de abusos y abandonos, pero que luchó hasta el final por conseguir sus metas, esforzándose al máximo, luchando por sus sueños.
En el fragmento podemos ver su primera cita laboral, para el ingreso a un programa de capacitación en una compañia de la bolsa de valores; a la misma llega transpirado y sucio, habiendo pasado la noche anterior en la carcel (por no pagar las multas de estacionamiento) y previo a eso había estado pintando su departamento, porque estaba a punto de ser desalojado del mismo por falta de pago. En ese contexto entra a la enrevista, donde es recibido por grandes empresarios, que con sorpresa observan al postulante para la capacitación. Lo increible es que con todas las condiciones en contra, él logra el puesto, y ese es el comienzo de todo. Si no viste esta película, te la recomiendo.

Hoy quiero que reflexionemos sobre nuestras responsabilidades; la Biblia nos habla en diversos pasajes sobre ésto, Dios nos insta a que seamos diligentes.
En las distintas etapas de la vida de una persona, y puntualmente en la adolescencia, comenzamos a tener responsabilidades; una gran parte comienza con la escuela, los estudios, y a medida que crecemos forjamos nuestra personalidad, y es donde comenzamos a soñar con una profesión, un trabajo, un ministerio, un noviazgo, un matrimonio, una familia, y mucho más.

La pregunta es: ¿Cuánto costarán tus sueños?, y no estoy hablando de un valor en pesos o dólares, sino de la inversión de tiempo de tu vida.

Un punto imporante es que Dios acompaña los sueños de los diligentes, y que él usa a quienes están ocupados, y no a quienes les sobra el tiempo; veamos los siguientes pasajes, y preguntate:

1. Seleccionados por Dios:

"Con ellos les enviamos a nuestro hermano que nos ha demostrado con frecuencia y de muchas maneras que es diligente, y ahora lo es aún más por la gran confianza que tiene en ustedes" (2 Corintios 8:22)

Dios escoge a los diligentes, él confía y envía a quienes son dignos de confianza. ¿Estoy ocupando correctamente mi tiempo?

2. Sievos de Dios:
"Nunca dejen de ser diligentes; antes bien, sirvan al Señor con el fervor que da el Espíritu." (Romanos 12:11)

Cuando Dios me delega una tarea específica para servirle, el nos exige el 100% de nuestra entrega, y que lo hagamos con excelencia.
¿Estoy dando el máximo esfuerzo?

3. Tu progreso, el mejor ejemplo:

"Sé diligente en estos asuntos; entrégate de lleno a ellos,

de modo que todos puedan ver que estás progresando" (1Timoteo 4:15)

¿Mi vida es de ejemplo para otros? ¿mi esfuerzo es digno de imitar?

4. Alcanzando mis sueños:
"El perezoso ambiciona, y nada consigue; el diligente ve cumplidos sus deseos." (Proverbios 13:4) Diría el Coco Basile "No coments"
¿Estoy alcanzando mis sueños? ¿estoy trabajando para ello?

Entendiendo entonces la importancia de ser responsables; ¿cómo mido si soy o no diligentes?
Hagamos cada uno en lo personal una evaluación de cómo estamos ocupando el tiempo de nuestra vida hoy, y qué resultados estoy alcanzando.
Te ayudo con algunas preguntas:
Si estás en el secundario ¿Cuántas materias te estás llevando?, ¿qué estas haciendo para levantar esas notas? ¿cuánto tiempo de tu día fuera del colegio dedicás para estudiar?.
Con tu tiempo libre, ¿en qué lo estás invirtiendo? ¿hay excesivo tiempo libre en tu vida? Queda tiempo hasta fin de año... pilas!!!

Recordá, los sueños no llegan sólos, hay que conquistarlos, y en esa conquista hay esfuerzo y tiempo de inversión.
¿Querés que Dios acompañe tus sueños?, demostrale que sos diligente, hoy, con las responsabilidades que hoy tenés.

Su señor le respondió: "¡Hiciste bien, siervo bueno y fiel!

Has sido fiel en lo poco; te pondré a cargo de mucho más.

¡Ven a compartir la felicidad de tu señor!"

(Mateo 25:26)

Nota: Dedicado a mi cuñada en el día de su Tecnicatura. Aguante Pame!