Por qué a mi!!??

¿Alguna vez te hiciste esta pregunta?. Yo si, cientos de veces, y muchas de esas veces con un dolor inexplicable que me comía por dentro.

En nuestra vida muchas veces atravesamos por momento de gran angustia, de dolor, quizás hasta injustas, sin sentido; situaciones en nuestra familia, con nuestros amigos, en el colegio, en el trabajo, en cualquier espacio que vivamos cotidianamente estamos expuestos a atravesar situaciones que no podemos comprender con nuestro entendimiento, y naturalmente es explicable tener una reacción de bronca, de enojo, de desesperación, cuestinando por qué motivo nos sucedió eso a nosotros... por qué a mi!!! diría la ardillita (o lo que sea) de la Era de Hielo, que no logra alcanzar su nuez (ni la paz) en ninguna de las 3 películas.

Pero hoy quiero que podamos comprender, con la ayuda del Espíritu Santo, cómo Dios (sobrenaturalmente) utiliza en sus propósito, determinadas situaciones dolorosas, para edificación de nuestra vida... si, aunque no lo creas. En una de las cartas que Pablo le escribe a los Corintos, les dice:

"Las dificultades que tenemos son pequeñas, y no van a durar siempre.

Pero, gracias a ellas, Dios nos llenará de la gloria que dura para siempre: una gloria grande y maravillosa" (2 Corintios 4:17 -BLS-).

Si alguien me dijese a mi "la dificultad que estás viviendo es pequeña" probablemente yo le diría "la tuya será pequeña", pero sepamos que a esta carta Pablo la escribe desde la cárcel, donde el contexto era desolador, cuevas profundas, a oscuras, mal olor por doquier, encadenado, padeciendo hambre, frio incesante en invierno, calor sofocante en verano.

Lo que Dios nos dice con este versículo son las siguientes 3 cosas:

• 1: "Tu dificultad (tu problema, tu dolor, tu cansancio, tu "lo que sea") para mi es sencillo de resolver, depositalo en mis manos".
• 2: "Tu dificultad no durará para siempre, esto es una promesa de Dios para tu vida!, luego de todo desierto viene un oasis, siempre que llovió, paró.
• 3: En tercer lugar nos explica que TODO tiene un "para qué" más que un "por qué".

Por eso, más que preguntarnos ¿Por qué a mi?, nos preguntemos ¿Para qué a mi?; qué es lo que Dios quiere forjar en mi vida con esta situación que estoy viviendo, que me quiere enseñar; veamos más allá del simple hecho o circunstancia que estás atravesando, ¿qué desición Dios quiere que tomes?... y pensemos en situaciones que nos cayeron encima, de sorpresa, repentinamente (si estoy conduciendo un auto en una autopista de noche, sin respetar el límite de velocidad, con las luces apagadas, en contramano, sin cinturón de seguridad y hablando por celular... no es muy dificil de predecir qué sucederá. Si yo en esa situación me pregunto ¿Por qué a mi? soy un insensato -en término criollo y vulgar: un tonto-).

Entonces, ya sabemos que para Dios mi problema es insignificante, que no va a durar mucho tiempo más (AMÉN!), y que él tiene un propósito perfecto en eso. Y más allá de lo particular que te quiera enseñar, entiendo que existe una razón fundamental para nuestras tribulaciones (dificultades, problemas), y Pablo también se lo escribe a los corintos en el siguiente pasaje:

"Cuando tenemos dificultades, o cuando sufrimos, Dios nos ayuda para que podamos ayudar a los que sufren o tienen problemas" (2 Corintios 1:4 -BLS-)

Cuando entendimos lo trascendental de nuestras dificultades, Dios te dice "hay gente, que no me conoce, que vive tu misma situación (y hasta quizás peor) y no tiene consuelo" Dios te quiere usar para llevar esperanzas a quienes no se han encontrado personalemente con Jesús; si todo lo que viviésemos fuese como en un cuento de fantasías, dificilmente podríamos consolar a otros, y el mejor ejemplo es el de Pablo escribiendo esto desde la misma cárcel.

Dios quiere bendecirte, Dios te va a prosperar, Dios te va a dar aquello que soñás, Dios quiere magnificarse con tus éxitos, Dios quiere abrir los cielos sobre tu vida, sobre tu familia, sobre tu casa... pero hay una condición: cumplir su voluntad... y cuál es su voluntad???

"Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús" (1 Tesalonicenses 5:16-18).

¿¿¿Adiviná desde donde Pablo le escribió a los habitantes de Tesalónica esta carta??? Si, adivinaste, desde la carcel.

Estemos ALEGRES, en la dificultad ORAR sin cesar, demos gracias en TODA situación (en las buenas y en las malas).

Viene un tiempo nuevo, "no existe desierto ni tormenta donde Él no esté allí, ninguna situación va a superar el amor de Dios"

Que Dios te use esta semana.